Aimee Pearce
Como padres, tenemos grandes esperanzas y sueños para nuestras hijas e hijos. Queremos que sean exitosos, saludables, felices y amables. Y en algún lugar, a menudo esperamos que crezcan para cambiar el mundo de alguna manera. Si eres este tipo de soñador, aquí hay algunas ideas prácticas que te ayudarán a fomentar en ellos mayores capacidades de liderazgo en un mundo de cambios.
Si tienes hijos, sabrás que no faltan los dilemas por resolver cuando se trata de educarlos. Pero una de las grandes preguntas es: cuando nuestros hijos tienen acceso a tantas opciones y oportunidades, ¿Cómo les enseñamos a cuidar, a tener convicción, a hacer cambios? ¿Cómo educar a los niños para que sean excelentes seres humanos? ¿Cómo ayudarlos a diferenciar entre las acciones justas e injustas?
No siempre es fácil, especialmente cuando se trata de inculcar valores que a veces parecen ir en contra de costumbres arraigadas en la sociedad en la que se vive.
Si deseas que tus hijos crezcan con el propósito de ser parte del cambio en el mundo, aquí te compartimos 8 ideas prácticas para ayudarlos a lograrlo.
I. Enséñale a tus hijos acerca de la pobreza
Nuestro instinto puede ser proteger a nuestros hijos de las malas noticias. Es natural querer protegerlos de algunos de los horrores del mundo real. Pero si queremos educar a niños que cambien el mundo, es importante tener conversaciones, apropiadas para su edad, sobre la pobreza. Anna Goodworth es una madre estadounidense y escritora. Ella alienta a los padres a enseñar a sus hijos sobre la pobreza global desde una edad temprana.
“Todos los padres deben ser inteligentes sobre cuál es el temperamento de sus hijos. No tienes que hablar sobre el tráfico sexual, pero puedes hablar sobre los niños que se ven obligados a trabajar”, dice Anna. “Es triste que no les demos cosas de qué preocuparse que puedan cambiar. Siempre tenemos cosas de las qué preocuparnos, pero es lo que es y cuánto poder tenemos para cambiarlo”.
Hace unos años, Anna les enseñó a sus hijos sobre la esclavitud. Sus hijos solo tenían 5 y 7 años en ese momento, pero tenían muchas preguntas, especialmente si todavía existía la esclavitud. Una vez que entendieron que sí, decidieron tomar medidas prácticas. Sus hijos escribieron cartas a sus congresistas y ayudaron a influir en uno de sus representantes para que apoyara un proyecto de ley contra la trata de personas, que ahora es ley. ¡Eso es cambiar el mundo!
II. Cultiva una cultura familiar de generosidad
No todas las familias hablan abiertamente sobre el dinero, pero a muchos de nosotros nos gustaría un poco más, ¡incluidos nuestros hijos! Contrarrestar la mentalidad de 'nunca es suficiente' y cultivar una cultura de generosidad en su familia requiere una decisión intencional. Involucrar a los niños en discusiones sobre las finanzas de su familia y cómo puede usar parte de sus ingresos para invertir en proyectos que cambien el mundo puede ser una forma realmente poderosa de abrir los ojos de sus hijos al poder positivo del dinero.
Como familia, podrían crear su propio fondo de emergencia para donar a las crisis, ya sea a nivel mundial o en su propia comunidad. También, podría establecer una meta de ahorro para poder patrocinar a un niño u a otro si ya está patrocinando. Cualquiera que sea la inversión que cambiará el mundo de su familia, involucre a sus hijos en el proceso de toma de decisiones y asegúrese de que también sean parte de la implementación, para que se apropien del compromiso de su familia de vivir generosamente.
III. Hazlo personal
Para muchos niños, la pobreza y muchos otros grandes problemas parecen un concepto lejano, muy alejado de su propia realidad. Encontrar formas de acercar la necesidad de los demás al mundo de su hijo puede ayudar a que los problemas sean personales. Patrocinar a un niño es excelente para los pequeños porque crea una conexión única con otro ser humano que puede cambiar la vida de todos. Conocerán a la niña o niño al que están patrocinando a lo largo del tiempo a través de fotos, videos y mensajes, y sus hijos también pueden aprender sobre la comunidad en la que viven, su cultura, la comida, las atracciones turísticas y sus tradiciones. Es una excelente manera de ampliar sus horizontes, pero de una manera personal y familiar.
A las niñas y niños les encanta el correo y eso hace que patrocinar también les resulte emocionante. Pueden desarrollar sus propias habilidades de comunicación mientras dan algo muy especial a su patrocinada(o). Nuestra investigación muestra que los niños patrocinados que intercambian cartas con su patrocinador experimentan más esperanza, felicidad y confianza.
IV. Enséñale sobre la vida del niño que estás patrocinando
Ser un patrocinador de la niñez les da a tus hijos la oportunidad de aprender cuán diferentes y, a veces, cuán similar es la vida en otras partes del mundo. Explorar algunos de los desafíos que enfrentan su niña o niño patrocinado y su comunidad es una excelente manera para que sus hijos descubran algunos problemas globales y cómo afectan a una persona real, e inspirarlos a buscar soluciones.
Las actualizaciones de información de la comunidad y los videos que recibe sobre su patrocinado son un excelente punto de partida para comprender algunos de los problemas que enfrentan. También encontrará información detallada cuando reciba su Informe Anual de Progreso y siempre puede ampliar la oportunidad de aprendizaje haciendo su propia investigación sobre algunos de los problemas que descubra.
Explorar por qué la buena nutrición o el agua limpia son tan importantes para la salud y el bienestar de un niño, o cómo el acceso a la educación puede empoderar a los niños para escapar de la pobreza, podría abrirles los ojos a algunos de los grandes desafíos que enfrentan otros niños y estimular su compromiso con luchando contra la injusticia.
V. Alimentar sus pasiones
Las niñas y niños naturalmente están más interesados en algunos temas que, en otros, ¡así que déjate llevar! Algunos se sentirán realmente conmovidos por algunos de los problemas que afectan a su patrocinado, tal vez el agua o la sequía. Para los niños mayores, pueden ser problemas como el matrimonio infantil o el tráfico de niños. Otros se conectarán más con el cambio climático o la conservación. Sea lo que sea, alentarlos en sus pasiones y los temas que les interesan es una excelente manera de fomentar una visión del mundo.
Una forma de convertir sus pasiones en acciones positivas es ayudarlos a recaudar fondos para una causa que quieran apoyar. Si a tu familia le encanta andar en bicicleta, escalar montañas, tejer, cantar o cualquier otra actividad, puede aprovechar dos pasiones en una y proponerse un desafío de recaudación de fondos que sus amigos y familiares lo patrocinen. Es una gran oportunidad para alentar a sus hijos en sus pasiones y ayudarlos a marcar una diferencia real, al mismo tiempo que se unen como familia.
VI. Busca oportunidades de aprendizaje
Si no estás seguro cómo comenzar el viaje de aprendizaje de justicia social de tu familia, ¡los eventos actuales son una excelente manera de comenzar! Habla con tus hijos sobre lo que está sucediendo en las noticias en este momento, tanto a nivel local como mundial, y busque maneras de hacer que los problemas cobren vida. Una vez que comience a buscar, se sorprenderá de la cantidad de eventos y actividades que se llevan a cabo en su área local, desde días de plantación de árboles hasta festivales multiculturales organizados por grupos de refugiados.
Días de reconocimiento internacional también puede ser una manera fantástica de hacer que su familia piense en algunos temas que quizás nunca hayan considerado, y hay una gran cantidad de excelentes recursos disponibles en línea para profundizar en cualquier cosa que despierte su interés.
Por supuesto, es importante no sentirse abrumado. Anna Goodworth sugiere centrarse en un problema a la vez y trazar formas en que su familia puede tomar medidas prácticas durante un período determinado, como las vacaciones de verano. Anna dice que este enfoque ayuda a motivar a los niños a participar, sin abrumarlos con múltiples problemas al mismo tiempo.
“Puedo decir, Está bien, esta semana son los refugiados. Leamos un libro sobre refugiados y hagamos un acto de servicio”, dice. “No tiene que ser mucho, pero debería exponerlos y empoderarlos de alguna manera”.
VII. Conecta a tus hijos con las necesidades de su propia comunidad
Es difícil para nuestros hijos entender la necesidad si nunca la ven con sus propios ojos. Puedes comenzar poco a poco teniendo conversaciones sencillas con tus hijos, explorando sus respuestas cuando notan necesidades a su alrededor, planteando preguntas de sondeo y reconociendo cuándo es apropiado exponerlos en un nivel más personal y significativo. Esto podría implicar ayudar en un comedor de beneficencia local o visitar a los ancianos en el centro de cuidado de ancianos de su vecindario. Sea lo que sea, las pequeñas acciones ayudarán a sus hijos a identificar las necesidades que los rodean y a ser más conscientes de las formas en que pueden marcar la diferencia.
VIII. No lo fuerces
Todas las niñas y niños son diferentes. Algunos serán claramente transformadores del mundo apasionados desde el primer día, mientras que otros pueden desarrollar empatía y la confianza para actuar más adelante en la vida. No importa dónde se encuentre tu hijo, tendrá días y momentos en los que simplemente no lo entenderá o actuará de manera egoísta. ¡Está bien! Si tu hijo no muestra interés en este momento, Ana Goodworth recomienda esperar una oportunidad cuando se comprometan nuevamente. Como en todas las áreas de su vida, los niños aprenderán y crecerán a su manera y a su propio ritmo, y a veces necesitan espacio para hacerlo.
Si quieres ayudar a las niñas y niños que pasan circunstancias difíciles en nuestro país y quieres ser parte de su progreso, hay una maravillosa labor que puedes hacer: patrocinar a un niño. ¡Descúbrelo!
Más de 69.000 sonrisas reafirman nuestra labor.
